Tras los recientes acontecimientos provocados por la DANA en la provincia de Valencia, es vital abordar de manera adecuada el estado de las instalaciones eléctricas que hayan sufrido inundaciones. Desde Vidal AC, compartimos un análisis detallado y una guía de actuación basada en las recomendaciones del Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT) y nuestra experiencia técnica, con el objetivo de garantizar la seguridad y funcionalidad de estas instalaciones.
Indicaciones generales para instalaciones afectadas por inundaciones
Las instalaciones eléctricas que han estado expuestas a inmersión o humedad extrema durante una inundación están sujetas a riesgos significativos, tanto para la seguridad de las personas como para la integridad del sistema. La acumulación de agua, especialmente si contiene residuos sólidos o químicos, puede causar:
- Deterioro de los componentes eléctricos internos.
- Pérdida de la capacidad aislante de materiales.
- Fallos funcionales en los cuadros eléctricos y sus protecciones.
- Aumento del riesgo de sobrecalentamientos, cortocircuitos o descargas eléctricas.
Por estas razones, es esencial realizar una evaluación exhaustiva de los daños y tomar medidas correctivas basadas en los estándares del REBT y las mejores prácticas del sector.
Evaluación de daños: Qué revisar y cómo proceder
La evaluación del estado de las instalaciones debe centrarse en los componentes clave, realizando un análisis visual y técnico que permita determinar si es posible reparar o si es necesaria la sustitución completa del sistema eléctrico.
Elementos críticos a supervisar según el REBT
El REBT exige el mantenimiento periódico de las instalaciones eléctricas, incluyendo revisiones específicas tras eventos extraordinarios como inundaciones. Los elementos clave a revisar incluyen:
- Cuadros eléctricos de mando y protección:
- Inspección visual de daños, acumulación de residuos sólidos o corrosión.
- Comprobación del estado de interruptores, fusibles y protecciones diferenciales.
- Estado de los conductores y conexiones:
- Verificar si los cables han sufrido desgaste, corrosión o exposición prolongada al agua.
- Asegurar que las conexiones sean firmes y estén libres de residuos.
- Canalizaciones:
- Inspeccionar posibles obstrucciones, daños estructurales o acumulación de residuos en conductos.
- Alumbrado de emergencia y señalización:
- Comprobar que los sistemas de emergencia estén operativos y en conformidad con las normativas de seguridad.
- Protecciones eléctricas:
- Confirmar que interruptores y fusibles funcionan correctamente y que su dimensionado es el adecuado.
- Puesta a tierra:
- Evaluar la continuidad de las conexiones de tierra para garantizar la protección ante fallos eléctricos.
Pruebas técnicas recomendadas:
Tras la inspección visual, es fundamental realizar pruebas técnicas para determinar el estado real de los componentes:
- Pruebas de aislamiento: Verificar que el aislamiento de los conductores no ha sido comprometido por la humedad.
- Pruebas de continuidad: Asegurar que los circuitos eléctricos no presentan interrupciones.
- Pruebas de derivaciones: Detectar posibles fugas eléctricas.
- Pruebas de funcionamiento de las protecciones: Confirmar que los dispositivos diferenciales y térmicos operan correctamente bajo condiciones normales.
Actuaciones recomendadas según los resultados de la evaluación
1. Sustitución de cuadros eléctricos y protecciones
En la mayoría de los casos, los cuadros eléctricos estándar y su aparamenta no están diseñados para resistir situaciones de inmersión prolongada o acumulación de residuos sólidos. Por ejemplo:
- La aparamenta eléctrica tiene un grado de protección IPX0, lo que significa que no cuenta con protección contra el agua.
- Los cuadros eléctricos instalados en interiores suelen tener un IP54, que protege contra el polvo y salpicaduras, pero no contra inmersiones o agua a presión.
Por estas razones, recomendamos la sustitución de cuadros eléctricos que hayan estado en contacto con agua. Esto asegura:
- La eliminación de componentes dañados o deteriorados.
- La reinstalación de sistemas con niveles de protección adecuados para prevenir futuros riesgos.
2. Instalación de sistemas con mayor protección IP
En zonas propensas a inundaciones, es recomendable optar por cuadros eléctricos y envolventes con grados de protección más altos, como:
- IP67: Protegido contra la inmersión temporal.
- IP68: Protegido contra inmersión prolongada.
Este tipo de sistemas garantiza una mayor durabilidad y resistencia frente a condiciones adversas.
3. Limpieza y mantenimiento preventivo
Si la sustitución no es inmediata o viable, se deben tomar medidas temporales de limpieza y mantenimiento:
- Retirar residuos sólidos y agua acumulada utilizando métodos como aire comprimido y paños secos.
- Limpiar a fondo conexiones y componentes eléctricos visibles.
- Asegurar el apriete de conexiones eléctricas para evitar arcos eléctricos o sobrecalentamientos.
Es importante destacar que estas acciones solo son soluciones temporales y no eliminan la necesidad de una evaluación técnica más profunda y la posible sustitución.
Apoyo de Vidal AC: Servicios especializados para instalaciones afectadas
Entendemos la magnitud de los desafíos que enfrentan muchas empresas tras los efectos de la DANA. Por ello, en Vidal AC nos ponemos a disposición de todos los afectados para:
- Evaluar el estado de sus instalaciones: Contamos con técnicos especializados en análisis de daños eléctricos.
- Ofrecer asesoramiento técnico personalizado: Recomendaciones adaptadas a cada tipo de instalación y grado de afectación.
- Suministro de soluciones inmediatas: Cuadros eléctricos y componentes diseñados para condiciones exigentes.
📩 Contacto: postventa@vidal-ac.es
📱 Teléfono de atención: 615 573 783
En Vidal AC estamos comprometidos con la seguridad y continuidad de sus operaciones. Juntos, podemos superar las adversidades y garantizar el correcto funcionamiento de sus instalaciones.
